La canción de Nora - Erika Lust

Nora tiene veinticuatro años, mucho carácter y arrojo, más sentido del humor y, sobre todo, unas ganas infinitas de disfrutar de lo que la vida le pone por delante.
Durante los inicios de su carrera en el cine en la Barcelona más cool, se debatirá entre dos hombres muy diferentes: Xavier, un joven productor ambicioso y sofisticado, y Matías, un creativo apasionado, atractivo y misterioso.
Con Erika Lust, reconocida y galardonada directora de cine «porno para mujeres», por fin llega una auténtica profesional a la narrativa erótica contemporánea.

La historia

Cuenta la vida de Nora desde el momento en que llega a España, procedente de su Suecia natal para vivir en la tierra del padre que hace años no ve.

Nora es pelirroja, voluptuosa, puede tomar grandes cantidades de alcohol, tiene un carácter potente y su sueño es ganar un Oscar, porque Nora es cineasta, aunque aún no pudo concretar su soñada película.

En realidad, a sus veinticuatro años, está buscando su camino, construyendo su destino, aunque parece no encontrarle la vuelta y termina dando dos tropezones por cada paso que avanza.

En sus primeros días en España Nora conoce a Xavi el refinado y carismático hijo de un productor de cine. Esa misma noche conoce a Matías, un argentino que la cautivó a primera vista.

De ahí en adelante, somos testigos de la desenfrenada vida diaria de Nora. Amigos nuevos que aparecen y viejos amigos que se van, los sueños que se sueñan y los que se hacen realidad, y los amores que aman y los que solo se desean.

En pocas páginas, Erika Lust nos cuenta la vida de la protagonista, la desnuda, la vuelve a vestir y nos invita a acompañarla en la búsqueda de lo que quiere encontrar.

Mis sensaciones

¡Ay! … no me enganchó.
Me aburrió bastante y cuando, por momentos,  comenzaba a interesarme el relato, la historia volvía a retroceder dos casilleros.
Leer esta novela es como repasar la transcripción de los pensamientos que una mujer  recopiló durante una crisis existencial de su juventud. Vertiginosamente, con pocos diálogos y con un clima muy monótono, la autora se dedica a describir paso a paso el camino que Nora emprende buscando la estabilidad que parece nunca encontrar.
Mi gran sensación es que está novela quiso ser mucho y como dice el dicho, quien mucho abarca poco aprieta y al final, no termina siendo ni erótica, ni romántica; ni comedia, ni drama. Es un conjunto de todo, como la vida misma.

¿Erótica?

Realmente no. Si bien el sexo intenta estar presente en todo momento, ya deje aclarado en otras reseñas que lo sexual y lo erótico para mí no son la misma cosa.
Al menos a mi no me sedujo pero debo destacar que las escenas de sexo no son para nada vulgares y están narradas de un modo fresco, casual, sin tapujos, siendo un claro reflejo de la vida que lleva una joven de 24 años, que está en la búsqueda y en esa tarea, prueba, explora, rechaza y acepta experiencias.

¿Qué esperaba de esta lectura?

Habiendo leído que su autora es productora de cine porno para mujeres, esperaba una novela más original, más profunda y fundamentalmente que me sorprendiera dentro del género erótico. ¡Esperaba una revolución!

Lo que encontré fue una historia con rumbo difuso, una cadena de conflictos y situaciones que fueron formando una fila india hasta trazar una línea recta que unió el principio con el final.

Como dije antes, en el plano erótico, que es donde más podía sorprenderme una experta en el tema, no encontré nada interesante.
También esperaba que la protagonista se debatiera entre dos amores, cosa que leí en varias reseñas, sin embargo, para mí nunca estuvo entre dos amores, ni confundida. Claramente su elección siempre estuvo clara, pero les dejo ese punto en suspenso para no caer en spoilers.

Lo que si sucede es que Nora tiene dos hombres en su vida y con cada uno se vincula de distinta manera y experimenta distintos sentimientos por ellos.

Lo que me gustó

De esta historia es la composición de los personajes me resultó muy pobre.
En Nora recae todo el peso de la historia y su personaje es coherente, interesante e impredecible, y gracias a ella no abandoné el libro.
Es una mujer que podemos encontrar entre nuestras amigas o compañeras de trabajo, una mujer con los sueños y vulnerabilidades que nosotras podemos tener y la sinceridad del personaje para expresar sus miedos, sus metas y sus anhelos más tímidos me generó mucha empatía.
Nora es una mujer fuerte, que no baja los brazos y que no descansa un segundo en busca de su felicidad, aunque no siempre la encuentre.
Xavi y Matías son dos escoltas en esta historia, donde los protagonistas secundarios son los sentimientos, los miedos, la amistad, los cambios o el crecimiento personal.
De todos modos, junto con los otros personajes secundarios dan color a esta historia y la cargan de situaciones que la autora narra en detalle.
Todos están muy bien delineados y resultan muy cercanos. Estoy segura de que cada lector puede comparar a cada uno de ellos con algún conocido, amigo o familiar.

El discurso

Creo que fue lo que no me hizo amena la lectura. Mucha descripción, poco diálogo y un relato sin descanso de la vida diaria de Nora. Si bien es un narrador omnisciente que en tercera persona nos cuenta la historia, en ningún momento tenemos una mirada de los otros personajes y las respuestas que Nora no encuentra, nosotros tampoco.

La historia presenta saltos de tiempo muy amplios pero pasan casi desapercibidos en la lectura. Un año en la vida de Nora transcurre en un renglón que si no se presta atención a esa línea, no lo notaríamos.

Si bien el discurso es muy fluido y pese a tanta descripción de hechos, sucesos y sentimientos  no deja de ser fresco y jovial, debo decir que para mi gusto personal no fue agradable. Es algo totalmente subjetivo.

En resumen

Una historia que me dejó sabor a poco y un relato que no me condujo a nada.

Destaco la frescura de la pluma, los personajes creíbles y la íntima exploración de los sentimientos y deseos de la protagonista.

"La canción de Nora" es una radiografía del corazón y la mente de una mujer moderna, joven y valiente, que busca sin descanso y sin perder la esperanza.

Hacia el final del libro logré emocionarme y el último capítulo lo disfruté mucho, sintiendo profundamente los hechos narrados pero sólo fue al final. Antes de eso, nada para recordar. Ni fu, ni fa.

Como dije al principio, este libro describe los sueños que se sueñan y los que se hacen realidad. Lo que se desea y lo que se tiene.

Reseña tibia, muy tibia de una novela con una muy calurosa prensa.