Decisiones (Dulces mentiras amargas verdades #03) - Lily Perozo

La diversión se ha detenido, y el dolor ha llegado a oscurecer sus corazones. Todos, sin excepción, serán perseguidos por sus pasados, horribles demonios que dejaran expuestas sus almas al dolor y la contundente revelación de sus historias escondidas.
Las cartas serán vueltas, y aún en contra de sus deseos, sus manos ocultas quedarán a la vista de todos, aun cuando sigan insistiendo en encubrirse tras muros que se desmoronan irreversiblemente.
Las máscaras serán destruidas y los verdaderos rostros saldrán a la luz, no importa cuánto corran a refugiarse tras la engañosa protección de las mentiras, las verdades emergerán inevitablemente.
En medio de la tempestad, el amor y la confianza serán el único bastión, una reconfortante isla que los fortalecerá. El perdón será la roca que afianzará sus vidas y les dará a todos su tan esperado norte.

Ya falta poco... un libro más y me encuentro con el final. Aunque sé que viene un mimo en forma de relato para dejarme llenita.

En el libro anterior les contaba que la historia se había convertido en un recreo de placer. Que los conflictos casi no aparecían y que fueron páginas y páginas descubriendo a Rachel y Samuel disfrutando de su relación.
También les dije que el título «Revelaciones» no hacía justicia, que al menos a nosotros los lectores, no se nos mostraban muchas respuestas. Los que se llevaron una revelación fueron los protagonistas, al descubrir que sus sentimientos eran más intensos de lo que habían esperado.
Y así llegué a «Decisiones», un libro intenso donde comienzan a REVELARSE muchos de los interrogantes que la autora sembró durante el primer y segundo libro.

Mis sensaciones

Me molesta mucho que una historia se fragmente en tres, cuatro o hasta cinco entregas (Hola Crossfire!), sólo para vender más libros. Pero amo cuando la distribución del discurso se realiza en la medida justa.
El libro anterior fue un puente necesario para llegar a «Decisiones», un libro que necesita tener como protagonistas una pareja consolidada.
Por eso les decía en mi reseña anterior, que si bien el segundo libro podía ser muy romántico y sin conflictos, era absolutamente necesario. Debían consolidarse como pareja para poder enfrentar el tercer y cuarto libro.
Insisto en esto y lo haré hasta que deje de reseñar: distribuyan bien el discurso!!!
Lily Perozo lo hizo y el resultado es positivo. Es el único modo de leer cuatro libros sin saturarse o cansarse de todo.
Entonces, este tercer libro me gustó muchísimo. Hubiera sido distinto si luego del puente que fue «Revelaciones» me encontraba con otro compilado de situaciones en loop, como me sucedió con todos los libros de «Pídeme lo que quieras....»
Pero no sucedió. Encontré un libro que me explicó porqué el libro anterior había sido tan despojado de tensiones y conflictos. Me explicó porqué durante todo un libro, Samuel y Rachel eran una pareja gozando plenamente.
Y la explicación me la dio la historia misma que fue demoledora.

El discurso

Rachel y Samuel ya descansaron. Ya tuvieron su recreo de placer y al regresar a Nueva York vuelve la tensión al relato.

Los interrogantes que Lily Perozo sembró desde el primer libro se despejan y Samuel nos revela a través de un flashback escalofriante, qué fue lo que sucedió la noche en que su madre murió.

Se me estrujó el corazón. Lloré con su relato con mucha impotencia. Sentí la crueldad en la piel y el dolor de ese hombre tan fuerte me dejó conmovida.

El sentimiento de injusticia se hace carne y no hay consuelo. Es dolorosísimo pensar que un niño tuvo que vivir un hecho tan traumático y cruel. Es dolor puro.

El tercer libro sorprende, impacta y conmueve. La autora supo crear los climas precisos para que la lectura se nos haga carne y la empatía sea absoluta. 

La emoción llega y la comprensión también. Empatía pura.

También logra sorprendernos. A pesar de que sembró indicios durante más de mil páginas en sus libros anteriores, las respuestas nos golpean con impacto y la tensión dramática es tan equilibrada que solamente queremos leer más.

Si bien hay tramos de la lectura que son duros y de una sensibilidad extrema, la rama del romance y las historias secundarias, alivianan el discurso. Todo está dosificado en la medida justa, como para hacer de la lectura un entretenimiento placentero que a su vez nos despierta la ansiedad de conocer el desenlace final.

En este libro seguirán encontrando sexo en cantidades industriales. Escenas eróticas de gran creatividad y las historias secundarias que entretienen, dándonos un respiro ante la intensidad de la protagónica.

En cierto punto me recordó a Caballo de fuego (salvando todas las distancias que tiene mi trilogía favorita) porque hay una gran familia de "machos" (que en vez de árabes son brasileros) y cada uno de ellos tiene un encanto especial que nos lleva a querer leer su propia historia.

Entonces, Thor con Megan y Reinhard con Sophia aportan al relato un aire que equilibra el discurso.

  

Los personajes

En este libro es donde comienzan a notarse los cambios en los personajes. Sin dudas, es una consecuencia de todo lo sucedido en el segundo (¡¡¡porque hay decisiones autorales que tienen una gran justificación!!!! *ya me calmo*)

Megan, que en el libro anterior me saturó un poco, comienza a ponerse más firme y madura frente a sus padres. Le falta, le falta un montón, pero comienza a plantarse desde otro lugar.

Otro que da un giro inesperado es Henry Brookman, uno de los personajes más interesantes y con más matices dentro de la historia. Despreciable en todos sus aspectos pero que puede llegar a sorprendernos. 

Rachel y Samuel también muestran un crecimiento muy notorio. Si bien su vínculo sigue marcado por la pasión y el miedo al compromiso, ambos se muestran rendidos a lo inevitable. Asumen sus sentimientos y la ingobernabilidad de los mismos.

Les queda un gran paso: confiarse el uno al otro su pasado.

Si bien, la autora nos hace cómplices de los personajes, permitiéndonos saber qué fue lo que dejaron atrás, aún falta que Rachel y Samuel se confiesen entre ellos. Que se abran y entreguen por completo. 

Por suerte... falta todo un libro más!

En resumen

«Decisiones» es un libro intenso que tiene todos los climas y mucha sensibilidad. Es aquí donde comienza a REVELARSE todo y donde definitivamente la historia se nos mete en la piel.
Así como el segundo es un recreo que nos prepara para este poderoso tramo de la historia, «Decisiones» es un propulsor hacia el final de la historia.
No se detengan, sigan adelante, que pase lo que pase, la historia es un viaje imperdible.